En mis 10 años de experiencia liderando áreas de Atracción y Selección del Talento, me he reunido con buenos profesionales que poseen una excelente experiencia laboral. Sin embargo, más allá de lo impecable que eran sus hojas de vida, no pudieron brillar con el mismo fulgor durante una entrevista laboral. Y es que un buen currículum cumple su cometido hasta el momento de ser llamado para una entrevista personal. En esta fase entran en juego otros factores que para muchos postulantes pasan “desapercibidos”.
Más allá de la adaptación que estés dispuesto a mostrar con la cultura de la empresa, y en el equipo del que formarás parte, es importante que en esa primera reunión destaques lo mejor de ti y evidencies que eres el profesional que necesitan.
La actitud: sello de la primera impresión
Prepararse para una entrevista de trabajo, no solo implica llenarse de optimismo y expectativas, sino mostrar una excelente actitud. Esto comienza desde la forma en que saludamos a la persona que nos da la bienvenida a la empresa (una secretaria, una recepcionista o un asistente) hasta el momento de nuestro primer encuentro con nuestro entrevistador. Ten por seguro que quien te reciba, compartirá la amabilidad y la buena disposición que percibió de ti, con el encargado de selección de personal.
Una vez que llegue el momento de la entrevista, continúa mostrando actitud cordial y segura, hablando en primera persona y manteniendo contacto visual con tu entrevistador.
Haz una investigación previa
Con la diversidad de medios digitales que existen hoy en día, resulta imposible no tener información acerca de la empresa en la que pretendes ingresar. Es importante demostrar a tu entrevistador que tienes presente la trayectoria de la empresa, así como sus logros obtenidos. Esto te brindará mayor confianza y dejarás en claro el interés que tienes en formar parte del equipo. No esperes a que te pregunten, ¡adelántate y demuestra que te has preparado!
Por medio de LinkedIn también podrás indagar más sobre tu entrevistador, de ahí obtendrás una noción sobre cómo podrían encajar contigo, la cultura y los valores de la empresa a la que pretendes entrar.
Adecua tu atuendo
Recuerda que, no es lo mismo trabajar en un Banco que en un operador logístico. Al revisa previamente tu atuendo para el día de la entrevista, es importante tomar en cuenta el tipo de empresa a la que te presentas; pues, desde esa primera impresión, nuestro entrevistador podrá darse cuenta si somos, o no, ese talento que encajará en la cultura de la empresa a la que representa.
Si te es complicado llegar formal, es recomendable que con anticipación se lo hagas saber a la persona que te entrevistará. Créeme que lo entenderá, y no le será sorpresivo verte casual ese día, pues esa primera impresión pesa mucho.
Discurso de presentación
La finalidad es que el entrevistador se convenza de contratarte a ti, no a otra persona. Para ello, recomiendo preparar un speech de presentación personal, que sea poderoso y que en tres minutos puedas compartirle todas tus competencias y fortalezas profesionales que encajan con el puesto que deseas obtener. De esa manera le facilitas la información y tienes un recurso importante para tus próximas reuniones de networking.
Agradece por el tiempo
Una de las más valiosas que te brinda una persona, es su tiempo. Y hacérselo saber con un agradecimiento por la entrevista, no solo ter permitirá mostrar cordialidad, sino preguntar sobre los siguientes pasos en el proceso de selección. Recuerda que el inicio es tan importante como el cierre, en toda reunión.
Toda esta información y mucho más la podrás encontrar y desarrollar dentro del Programa de Marca Personal y Desarrollo Ejecutivo.
Si tienes alguna inquietud no dudes en escribirme: desarrolloejecutivo@soniacaceres.com
La Entrevista Personal, más allá del currículum
En mis 10 años de experiencia liderando áreas de Atracción y Selección del Talento, me he reunido con buenos profesionales que poseen una excelente experiencia laboral. Sin embargo, más allá de lo impecable que eran sus hojas de vida, no pudieron brillar con el mismo fulgor durante una entrevista laboral. Y es que un buen currículum cumple su cometido hasta el momento de ser llamado para una entrevista personal. En esta fase entran en juego otros factores que para muchos postulantes pasan “desapercibidos”.
Más allá de la adaptación que estés dispuesto a mostrar con la cultura de la empresa, y en el equipo del que formarás parte, es importante que en esa primera reunión destaques lo mejor de ti y evidencies que eres el profesional que necesitan.
La actitud: sello de la primera impresión
Prepararse para una entrevista de trabajo, no solo implica llenarse de optimismo y expectativas, sino mostrar una excelente actitud. Esto comienza desde la forma en que saludamos a la persona que nos da la bienvenida a la empresa (una secretaria, una recepcionista o un asistente) hasta el momento de nuestro primer encuentro con nuestro entrevistador. Ten por seguro que quien te reciba, compartirá la amabilidad y la buena disposición que percibió de ti, con el encargado de selección de personal.
Una vez que llegue el momento de la entrevista, continúa mostrando actitud cordial y segura, hablando en primera persona y manteniendo contacto visual con tu entrevistador.
Haz una investigación previa
Con la diversidad de medios digitales que existen hoy en día, resulta imposible no tener información acerca de la empresa en la que pretendes ingresar. Es importante demostrar a tu entrevistador que tienes presente la trayectoria de la empresa, así como sus logros obtenidos. Esto te brindará mayor confianza y dejarás en claro el interés que tienes en formar parte del equipo. No esperes a que te pregunten, ¡adelántate y demuestra que te has preparado!
Por medio de LinkedIn también podrás indagar más sobre tu entrevistador, de ahí obtendrás una noción sobre cómo podrían encajar contigo, la cultura y los valores de la empresa a la que pretendes entrar.
Adecua tu atuendo
Recuerda que, no es lo mismo trabajar en un Banco que en un operador logístico. Al revisa previamente tu atuendo para el día de la entrevista, es importante tomar en cuenta el tipo de empresa a la que te presentas; pues, desde esa primera impresión, nuestro entrevistador podrá darse cuenta si somos, o no, ese talento que encajará en la cultura de la empresa a la que representa.
Si te es complicado llegar formal, es recomendable que con anticipación se lo hagas saber a la persona que te entrevistará. Créeme que lo entenderá, y no le será sorpresivo verte casual ese día, pues esa primera impresión pesa mucho.
Discurso de presentación
La finalidad es que el entrevistador se convenza de contratarte a ti, no a otra persona. Para ello, recomiendo preparar un speech de presentación personal, que sea poderoso y que en tres minutos puedas compartirle todas tus competencias y fortalezas profesionales que encajan con el puesto que deseas obtener. De esa manera le facilitas la información y tienes un recurso importante para tus próximas reuniones de networking.
Agradece por el tiempo
Una de las más valiosas que te brinda una persona, es su tiempo. Y hacérselo saber con un agradecimiento por la entrevista, no solo ter permitirá mostrar cordialidad, sino preguntar sobre los siguientes pasos en el proceso de selección. Recuerda que el inicio es tan importante como el cierre, en toda reunión.
Toda esta información y mucho más la podrás encontrar y desarrollar dentro del Programa de Marca Personal y Desarrollo Ejecutivo.
Si tienes alguna inquietud no dudes en escribirme: desarrolloejecutivo@soniacaceres.com