Cada vez son más las personas que apuestan por trabajar su Marca Personal para empoderarse en su ámbito laboral. Si tú eres uno de ellos, entonces es necesario que primero consideres que la Marca Personal no se construye en función a “lo que se quieres ser”, sino en base a “lo que eres”. Si tu Marca no refleja fielmente “quien eres”, correrás el riesgo de que se desmorone como un castillo de naipes.

“Lo que somos” implica un conjunto de cosas, entre ellas: la reputación, la cual no debemos pasar por alto, porque está presente en cada uno de los ámbitos de nuestra vida. Y lo laboral, no es la excepción.

Nuestro mundo laboral suele ser pequeño y siempre existe la posibilidad de volver a toparte con ese ex jefe con el que no terminaste tu relación laboral de la “mejor manera”. Además, el mundo laboral, en general, es un medio que se mueve por contactos, por lo que se hace necesario que cuides tu reputación para que tu vida profesional no se vea afectada.

Recuerda que hay cuestiones éticas universales que debemos cuidar -siempre- en nuestra vida personal y laboral. Una de ellas, es: ser coherente con tu palabra. Esto conlleva a cumplir con tus promesas y compromisos. No pueden existir “medias verdades”, tus acciones deben revelar el profesional que eres, y “lo que eres” forma parte esencial de tu Marca Personal.

Cómo comenzar:

• Demuestra calidad y profesionalismo en todos los ámbitos en los que te desenvuelvas.

• Sé íntegro. Al hablar de integridad, nos referimos a tener una conducta intachable en lo profesional, y también en lo personal, lo cual incluye a todas las redes virtuales y reales que mantengas en tu vida.

• Denota confianza y sencillez. Ten por seguro que, las demás personas valorarán más cada logro que obtengas cuando te sorprendan y te feliciten por ello; no cuando tú mismo lo publiques a “grandes voces”, así no construyes una reputación que te sea favorable.

• Recuerda que tus contactos profesionales y amistades cercanas revelan quien eres. Cuídalas y fortalécelas, ellos son tu círculo más cercano.

Algo que yo siempre recomiendo para cada una de nuestras experiencias laborales en empresas es: el asegurarse ingresar por la puerta grande, así como de salir por la misma y con honores. Considera, sobre todo, que la reputación no es solo una cuestión de imagen, sino de ser un profesional real que lo transmita a través de sus acciones.